Autojustificaciones de un adicto para seguir consumiendo.
“Una copa después del trabajo es normal”, “Una raya no es consumo” … Son muchas las frases que se utilizan para los autoengaños de los adictos a alguna sustancia, ya sean drogas legales (alcohol, tabaco) o ilegales (cocaína, cannabis, anfetaminas…). Y cuanto más tiempo lleves consumiendo más difícil serán de eliminar los autoengaños. De esta manera, es importante estar atentos para identificar las autojustificaciones y poder tratar de rebatirlas.
Algunos autoengaños podrían ser:
- Yo cuando quiero consumo y cuando no quiero, no consumo. Indicando una falsa sensación de control sobre el consumo.
- Tengo mucho aguante al alcohol, necesito más para que me haga efecto. No es un efecto de inmunidad al alcoholismo como generalmente se le llama, sino de autoengaño. Y, además el entorno social suele estimular y aplaudir el consumo.
- Yo no soy adicto a las drogas, esos son los que están en la calle que piden para consumir, yo no estoy en esa situación por lo que no tengo problemas de drogas. Se asocian problemas de dependencia con etiquetas de consumidores socialmente rechazados, negando tener problemas.
- No soy alcohólico, puedo dejarlo cuando quiera. No me hago daño, ni se lo hago a nadie. Esto permite una desconexión emocional del adicto consigo mismo y con otras personas.
- Yo no tengo problemas, la gente con la que salgo consume lo mismo que yo y no tiene problemas. Normalmente, una persona no empieza a consumir solo, sino que lo hace con otra gente. Por eso cuando empieza a tener problemas de adicción, lo niega y lo justifica en los demás. Si ellos que son con los que empezó a consumir están bien, el también.
Normalmente estas situaciones se dan de manera gradual, para eliminar estos autoengaños una posibilidad es que las personas cercanas al afectado no se autoengañen también y colaboren para atravesar el problema.
